jueves, 18 de diciembre de 2014

Abusos sexuales e incesto según la mirada sistémica. Cómo trabajar los abusos con Constelaciones Familiares

La descompensación

Imagen de solución de una Constelación
Tanto los abusos sexuales como el incesto, nos hablan según lo sistémico, de una descompensación.
El desequilibrio se manifiesta en el Orden del Dar y el Tomar.
Generalmente, el hombre da más de lo que recibe y la diferencia entre la ganancia y la pérdida es muy grande.
Por supuesto, hablamos de una descompensación destructiva.
Un ejemplo de ello lo encontramos en el caso de una paciente que me escribe explicándome su duda: "Mi hija de 18 años, dice que mi pareja ha abusado de ella y yo, no sé si creerle".
En todos los mails que nos intercambiamos para el tratamiento On Line, ella me explicaba detalladamente cómo la hija intentaba demostrarle que aquel hombre la había violado.
A pesar de estas explicaciones, la paciente seguía dudando de su hija y pretendía que yo la ayudase a confirmar su veracidad y en caso afirmativo, a decidir qué hacer con su pareja a la que ella seguía amando.
¿Cómo se acaba con la descompensación destructiva en este caso?
La nueva pareja tiene que aceptar a la hija anterior al matrimonio.
Si la mujer no valora que ese hombre las mantenga a las dos, económica y afectivamente, se crea un desequilibrio.

La compensación

¿Cómo compensar ese desnivel sin que sea a través de un abuso?
Las frases sanadoras serían:
"Yo puedo ver que tú das más que yo. Por ello, yo lo acepto y te doy las gracias".

Desniveles en la sexualidad 

Muchas veces ocurre que la descompensación se produce a nivel sexual.
Este es el caso de la paciente cuya abuela fue abusada por su propio padre, conociéndose en la familia el hecho de que la bisabuela no quería saber nada de los hombres.
Lo que se intenta en este ejemplo, es compensar la falta de relaciones sexuales entregando a la hija a cambio.
Esta sería la dinámica inconsciente del incesto la cual, muchas veces, es la propia hija la que se ofrece al padre o al padrastro para evitar que el hombre se vaya y abandone a la mamá.
Recuerdo el caso de una chica de 25 años que había sido violada por su padrastro desde los 16 años.
Aún conservaba la foto del violador en su billetera. No le guardaba rencor y podía explicar sus vivencias con él sin la menor muestra de dolor.

Las consecuencias

En el caso de la última paciente, la rabia había quedado dirigida hacia su madre. No podía mantener con ella una convivencia pacífica y todo indicaba que tanto la madre como la hija, iban hacia un camino de destrucción. La madre con el alcohol y la hija con la droga.
Generalmente, las hijas se sienten culpables y para liberarse de esa culpa, para expiar lo ocurrido, sufren dificultades en sus vidas sexuales, deciden seguir en celibato o se meten en situaciones de alto riesgo ya sea con la droga o el sexo.

El camino del suicidio

El suicidio es una opción para superar la culpa pero lo que más debemos tener en cuenta es la elección de destinos que puedan llevar al suicidio o la entrada en situaciones de alto riesgo.
De manera que si en una paciente observamos estos comportamiento, podemos ir directamente a preguntar por abusos cometidos en la familia y revisar, en qué lugar del sistema ocurrieron tales hechos.

Las soluciones

Asumir la responsabilidad de los hechos y al mismo tiempo, conservar la dignidad.
¿Qué significa esto?
Los padres tienen que comprender la dinámica de su comportamiento y asumir sus responsabilidades.
La madre tiene que reconocer la culpa que tiene dentro del incesto y el amor que su hija tiene por ambos padres.
Los hijos tienen que poder salir de estas dinámicas con inocencia. Ellos aceptan por amor y se sacrifican para salvar la familia.

Frases sanadoras

La hija podría decir a la madre: "Lo hago por ti, mamá" y al padre: "Lo hice con gusto. Lo hice por
mamá y estoy de acuerdo".
Según Hellinger, la frase estar de acuerdo, es importante para las víctimas.

Bibliografía:
Felicidad Dual. Gunthard Weber. Ed. Herder
Manula práctico de Constelaciones Familiares. Método Alejandra Mitnik. Prof. Lic. Alejandra Mitnik. Autoedición