viernes, 18 de diciembre de 2015

Otro éxito después de constelar y una historia de amor después de la muerte

Acostumbro a pedir a mis alumnos y pacientes que compartan sus experiencias después de constelar o al aplicar las terapias energéticas.
Si tienes una historia que contar, envíamela a mi mail y la publicaré con mucho gusto.
Taller de Constelaciones BCN 2015
con la presencia del Dr. Jean Niklaus,
creador de las Neoconstelaciones

ÉXITO DESPUÉS DE CONSTELAR

María José, alumna de la Formación en Constelaciones Familiares Barcelona, consteló junto con el grupo, un trabajo para su hijo.
A los pocos días nos escribió:
"Chicos, el día Jueves examina mi hijo del carnet del aeropuerto. Gracias por la constelación tan linda que hicimos".
No pasaron las dos semanas que volvimos a saber de ella:
"Chicos, el 21 mi hijo empieza en Iberia a trabajar. Gracias!"

El relato de esta experiencia no sería diferente a muchos otros resultados exitosos obtenidos después de constelar, sin embargo, cuenta con dos elementos que nos ha sorprendido a todos los que participamos en la constelación.
1. El hijo de Maria José, hacia tres años que no encontraba trabajo.
2. En la constelación, el representante del trabajo sugirió que se buscara en la Zona Franca. ¿Adivinen dónde se situaba la empresa que hizo la selección de los candidatos y tomó el exámen al hijo de María José?


UNA HISTORIA DE AMOR DESPUÉS DE LA MUERTE

La sonrisa de Rufi
La historia que sigue, le ocurrió a María del Carmen, alumna de la Formación en Terapia de Activación del Potencial de los Sueños(®)
Cuenta que durante muchos años cuidó a una mujer mayor llamada Rufi a la que llegó a querer como si fuera su madre.
Recuerda que Rufi, nada más ver a Mari Carmen aparecer por la puerta, sintió que la conocía de toda la vida.
Durante el trabajo le leía libros espirituales y textos que hablaban del más allá e insiste en que siempre bromeaban sobre un pacto: "La primera que se vaya, tiene que venir a avisar".
Pasaron varios años y María del Carmen ya no pensaba en aquel pacto, hasta que un día recibe la llamada de una de las hijas de Rufi, diciéndole que su madre se encuentra en estado terminal y que le avisa porque sabe lo mucho que la apreciaba. 
Por la noche y ya en la cama mirando la tele, intentaba conciliar el sueño cuando de pronto, una luz dorada se enciende en la cocina, cosa que le sorprendió porque allí la única luz que hay es la de los tubos fluorescentes y es de color blanco.
La elegancia de Rufi
Al instante decide levantarse e ir hacia el pasillo hasta acercarse y ver a una señora joven riéndose, alguien desconocida para ella.
María del Carmen recuerda que abrió sus brazos en cruz con la intención de abrazarla mientras intentaba expresar unas frases, sin embargo, sus labios parecían pegados y con dificultad, sólo podía pronunciar las sílabas: "ma", "ma", "ma". 
Cuando por fin ambas se abrazan, la luz se esfuma de golpe, María del Carmen se despierta y se ve a sí misma recostada en la cama. Mira el reloj que marca las 02:32 y comprende que acaba de tener un desprendimiento de su cuerpo físico mientras define a la experiencia como un "abrazo astral".
Por la mañana, recibe un watsap en el que le informan que a las 02:00, Rufi falleció.
Les pide a las hijas que le envíen una foto de su madre para tener de recuerdo y para su sorpresa, al recibirlas, exclama: "¡Es ella!" 
Había reconocido a la mujer joven que le sonreía desde la cocina el día que Rufi murió.
En ese momento María del Carmen comprende que el pacto que ambas tenían, había sido cumplido.

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